05-09-2011, 19:02
La ley de tierras avanza en Diputados
Durante tres horas, los integrantes de la Comisión de Legislación General analizaron el proyecto que regula la compra de terrenos por parte de extranjeros. Se incorporaron modificaciones y podría haber dictamen el jueves 8.
La ley de tierras superó un nuevo escollo. El oficialismo logró llevar a cabo el debate previsto pese a la negativa de algunos sectores de la oposición y el proyecto se encamina hacia un dictamen consensuado que podría quedar plasmado el próximo jueves cuando por fin se realice el plenario de las tres comisiones a las que fue girada la iniciativa.
En un marco de alto consenso, la Comisión de Legislación General debatió ayer por más tres horas el proyecto que regula la compra de tierras por parte de capitales extranjeros. Con la presencia del equipo técnico del Ministerio de Agricultura, la presidenta del cuerpo, Vilma Ibarra, aseguró que ya se está trabajando en incorporar las modificaciones y sugerencias al proyecto que llegó desde el Ejecutivo y anunció, tras comunicarse telefónicamente con su par de la Comisión de Asuntos Constitucionales, Graciela Camaño, que en principio habría acuerdo para realizar el postergado plenario el próximo jueves a las 10 de la mañana.
La confirmación formal de la reunión conjunta llegará luego de que el agrodiputado tucumano y presidente de la Comisión de Agricultura, Juan Casañas, acepte la convocatoria. Más allá de esta posibilidad, y ante la chance de que el acuerdo de palabra naufrague, la Comisión de Ibarra votó que, en caso de no llegar a la próxima sesión con certezas sobre el plenario, se pedirá que el pleno de la Cámara fije la fecha y hora del encuentro.
Más allá de la presencia del bloque del Frente para la Victoria y Nuevo Encuentro, la reunión contó con la asistencia, tal como anticipó Tiempo Argentino, de diputados radicales, del peronismo disidente y del Interbloque del Frente Amplio Progresista.
El debate se centró en la necesidad de modificar aspectos técnicos de la ley y los porcentajes atinentes a las restricciones. La norma, que limita a un 20% la sumatoria de tierras rurales en manos de capitales extranjeros y pone un tope máximo de 1000 hectáreas por persona física o jurídica, recibió el apoyo de la mayoría de los bloques.
Ni el espíritu de la ley ni su fin fueron cuestionados. Sin embargo, distintos bloques de la oposición objetaron determinados puntos y pidieron cambios en la redacción de algunos de sus artículos. “Debemos tener un registro actual sobre quiénes son los dueños de la tierra. Hoy no sabemos qué cantidad de territorio está en manos de extranjeros. Necesitamos la foto del estado de situación actual del territorio argentino, y a partir de allí podemos saber qué porcentaje es razonable. Sin esos datos es imposible continuar”, sostuvo el diputado socialista Lisandro Viale.
Desde el peronismo disidente Felipe Solá explicó que “es necesario debatir los proyectos en el marco de la situación agropecuaria del país” y pidió puntualmente la modificación del artículo nueve de la ley referido al límite de hectáreas que puede adquirir un extranjero al advertir que choca con las garantías constitucionales.
El diputado oficialista Alejandro Rossi pidió tener en cuenta que la propuesta del Poder Ejecutivo no gira en torno a “si el extranjero puede o no ser propietario” sino al análisis de la tierra como “parte central del proceso productivo de Argentina”.
“No es una modificación en términos de derechos, sino en términos de producción”, advirtió Rossi, para quien se trata de “poner restricciones a un proceso que tiene disociada la tenencia de tierras de la actividad productiva”.
Tras los cuestionamientos, Ibarra aclaró que muchas de las modificaciones sugeridas ya están siendo realizadas: “Ya se han incorporado los porcentajes de posesión dentro de provincias y municipios, también hemos redactado la excepción para los extranjeros residentes y para aquellos que tengan hijos argentinos y también hemos tenido en cuenta el límite para los recursos naturales”, detalló.
Tanto desde el oficialismo como desde distintos sectores de la oposición aseguraron que el debate de la ley de tierras es el primer paso que también servirá para abordar una nueva ley de arrendamiento. El debate avanza y, en principio, tendría un capítulo importante el próximo jueves cuando se realice el plenario del que podría surgir un dictamen.
Fuente: Tiempo Argentino.
Fuente
Durante tres horas, los integrantes de la Comisión de Legislación General analizaron el proyecto que regula la compra de terrenos por parte de extranjeros. Se incorporaron modificaciones y podría haber dictamen el jueves 8.
La ley de tierras superó un nuevo escollo. El oficialismo logró llevar a cabo el debate previsto pese a la negativa de algunos sectores de la oposición y el proyecto se encamina hacia un dictamen consensuado que podría quedar plasmado el próximo jueves cuando por fin se realice el plenario de las tres comisiones a las que fue girada la iniciativa.
En un marco de alto consenso, la Comisión de Legislación General debatió ayer por más tres horas el proyecto que regula la compra de tierras por parte de capitales extranjeros. Con la presencia del equipo técnico del Ministerio de Agricultura, la presidenta del cuerpo, Vilma Ibarra, aseguró que ya se está trabajando en incorporar las modificaciones y sugerencias al proyecto que llegó desde el Ejecutivo y anunció, tras comunicarse telefónicamente con su par de la Comisión de Asuntos Constitucionales, Graciela Camaño, que en principio habría acuerdo para realizar el postergado plenario el próximo jueves a las 10 de la mañana.
La confirmación formal de la reunión conjunta llegará luego de que el agrodiputado tucumano y presidente de la Comisión de Agricultura, Juan Casañas, acepte la convocatoria. Más allá de esta posibilidad, y ante la chance de que el acuerdo de palabra naufrague, la Comisión de Ibarra votó que, en caso de no llegar a la próxima sesión con certezas sobre el plenario, se pedirá que el pleno de la Cámara fije la fecha y hora del encuentro.
Más allá de la presencia del bloque del Frente para la Victoria y Nuevo Encuentro, la reunión contó con la asistencia, tal como anticipó Tiempo Argentino, de diputados radicales, del peronismo disidente y del Interbloque del Frente Amplio Progresista.
El debate se centró en la necesidad de modificar aspectos técnicos de la ley y los porcentajes atinentes a las restricciones. La norma, que limita a un 20% la sumatoria de tierras rurales en manos de capitales extranjeros y pone un tope máximo de 1000 hectáreas por persona física o jurídica, recibió el apoyo de la mayoría de los bloques.
Ni el espíritu de la ley ni su fin fueron cuestionados. Sin embargo, distintos bloques de la oposición objetaron determinados puntos y pidieron cambios en la redacción de algunos de sus artículos. “Debemos tener un registro actual sobre quiénes son los dueños de la tierra. Hoy no sabemos qué cantidad de territorio está en manos de extranjeros. Necesitamos la foto del estado de situación actual del territorio argentino, y a partir de allí podemos saber qué porcentaje es razonable. Sin esos datos es imposible continuar”, sostuvo el diputado socialista Lisandro Viale.
Desde el peronismo disidente Felipe Solá explicó que “es necesario debatir los proyectos en el marco de la situación agropecuaria del país” y pidió puntualmente la modificación del artículo nueve de la ley referido al límite de hectáreas que puede adquirir un extranjero al advertir que choca con las garantías constitucionales.
El diputado oficialista Alejandro Rossi pidió tener en cuenta que la propuesta del Poder Ejecutivo no gira en torno a “si el extranjero puede o no ser propietario” sino al análisis de la tierra como “parte central del proceso productivo de Argentina”.
“No es una modificación en términos de derechos, sino en términos de producción”, advirtió Rossi, para quien se trata de “poner restricciones a un proceso que tiene disociada la tenencia de tierras de la actividad productiva”.
Tras los cuestionamientos, Ibarra aclaró que muchas de las modificaciones sugeridas ya están siendo realizadas: “Ya se han incorporado los porcentajes de posesión dentro de provincias y municipios, también hemos redactado la excepción para los extranjeros residentes y para aquellos que tengan hijos argentinos y también hemos tenido en cuenta el límite para los recursos naturales”, detalló.
Tanto desde el oficialismo como desde distintos sectores de la oposición aseguraron que el debate de la ley de tierras es el primer paso que también servirá para abordar una nueva ley de arrendamiento. El debate avanza y, en principio, tendría un capítulo importante el próximo jueves cuando se realice el plenario del que podría surgir un dictamen.
Fuente: Tiempo Argentino.
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